Hace ya muchos años escuché que el célebre Jack Nicklaus pregonaba la idea de jugar rondas de golf a 12 hoyos debido a que el factor tiempo estaba conspirando en contra del crecimiento del golf.

Fue un adelantado que visualizó la disminución de golfistas ocurrida antes de la pandemia del COVID 19. En algunos países la caída en cantidad de jugadores fue notoria en la última década, pero el cisne negro que afectó a todo el mundo resultó muy favorable para que el golf se revalorizará socialmente.

Un tema crucial en este análisis es reflexionar sobre el rol de la dirigencia del golf que no tuvo herramientas para combatir la disminución de golfistas y sí un factor exógeno a las estructuras del golf está incidiendo notablemente en un reverdecer de nuestra actividad.

Pero más allá de este factor azaroso que apareció lo cierto es que el factor tiempo seguirá siendo un elemento a tener en cuenta a la hora de evaluar los avances y retrocesos en el padrón mundial de golfistas.

Algunos clubes han tomado nota de un nuevo nicho del mercado que puede sorprender en el futuro y son los torneos de 9 hoyos impulsados por un grupo demográfico especial, que son los adultos mayores, que prefieren jugar menos tiempo y compartir más el hoyo 19 o acompasar la jornada del club con otras actividades sociales.

Los directores de torneos de los clubes deben estar atentos a los factores que más inciden en estos tiempos para atraer a los golfistas y a los nuevos comportamientos sociales tanto de los adultos mayores como de las nuevas generaciones.

Siempre hay oportunidades para mejorar la gestión de los clubes de golf. Les recomiendo no olvidar la utilización de la matriz FODA para evaluar y diagnosticar su club o las áreas de su entidad deportiva.